LAS CARACTERÍSTICAS DE UNA FIEL PROMESA A DIOS: ¿CÓMO ES UNA IGLESIA COMPROMETIDA CON DIOS?
12mo Sermón de la Serie
“... Y prometimos no abandonar la casa de
nuestro Dios.” Nehemías 10:39 (Pasaje Bíblico: Nehemías 10 – 12)
Para celebrar la restauración o reconstrucción en nuestras vidas hay que hacer un pacto con el Señor. El Problema de la vida Cristiana es que muchos quieren celebración en Cristo sin estar comprometidos con El.
BOSQUEJO BASICO:
I. Una Iglesia Comprometida con Dios comienza con el reconocimiento de nuestras impotencia, 9:36-48
Para celebrar la restauración o reconstrucción en nuestras vidas hay que hacer un pacto con el Señor. El Problema de la vida Cristiana es que muchos quieren celebración en Cristo sin estar comprometidos con El.
BOSQUEJO BASICO:
I. Una Iglesia Comprometida con Dios comienza con el reconocimiento de nuestras impotencia, 9:36-48
1. Una iglesia comprometida con Dios reconoce su
impotencia como resultado de un despertamiento espiritual
2. Una iglesia comprometida con Dios reconoce su
impotencia haciendo ‘fiel promesa’ al Señor.
3.
Una Iglesia Comprometida con Dios incluye a toda la
iglesia de Cristo, 10:28-31
II.
Tiene que ser toda la iglesia del Señor como un pueblo
separado, 28
1.
Se necesita toda la iglesia del Señor para hacer una
declaración para guardar la palabra de Dios,
V29
2.
Se necesita toda la iglesia del Señor para tomar juntos
la decisión de una consagración total a Dios, v30 (2 Cor. 6:14)
3.
Se necesita toda la iglesia del Señor para tener una
verdadera celebración como iglesia, V31; (Ef.
4:32; Col. 3:13)
III.
Una Iglesia Comprometida con Dios incluye el compromiso
de la contribución para el avance del Reino de Cristo, 10:32-33
1.
Cuando la iglesia contribuye, lo hace como una expresión
de que tiene un pacto con el creador, v32-33 (2 Cor. 9:7; 1 Tim. 3:15; 1 Pe. 2:5; Heb. 10:21)
2.
Cuando la iglesia contribuye, ofrece lo mejor, v34-37
3.
Cuando la iglesia contribuye, lo hace con el objetivo de
no abandonar la casa de Dios, v37-39 (Traed todos los diezmos al alfolí y haya
alimento en mi Casa, Mal. 3:10)
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