Las Fiestas Judías y el Dia de Acción de Gracias

 
Pastor Israel Cordovés, Jr. Meditación Pastoral del Día de Acción de Gracias 2025

El mandato: “Dad gracias en todo” (1 Tesalonicenses 5:18) es uno de los llamados más profundos y desafiantes de la Biblia. Dios no presenta la gratitud como una emoción pasajera o dependiente del ánimo, sino como una actitud constante del corazón, un reconocimiento permanente de Su soberanía aun cuando no estamos “de buen humor” o cuando no tenemos lo que quisiéramos. Dar gracias —incluso en tiempos difíciles— es un acto de obediencia que abre nuestros ojos para ver la mano de Dios obrando silenciosa, fiel y amorosamente en cada área de nuestra vida. ¿Qué tal si recordamos en este día de Acción de Gracias (Thanks Givinig), las fiestas del pueblo judío?

Las siete fiestas principales del calendario bíblico —Pascua, Panes sin Levadura, Primicias, Shavuot, Trompetas, Día de Expiación y Tabernáculos— eran momentos en los que Israel pausaba para recordar la bondad y fidelidad del Señor (Levítico 23). En cada una de estas celebraciones agradecían la liberación, la provisión, el perdón y la protección divina. Incluso en Yom Kipur, la fiesta más solemne, el pueblo reconocía con humildad la gracia salvadora de Dios. Cada fiesta era una oportunidad para mirar atrás y reconocer que Dios había guiado, sostenido y cubierto a Su pueblo en todo momento.

Además de estas siete celebraciones, Israel también observaba el Año del Diezmo (Deuteronomio 14:28–29) y el Año del Jubileo (Levítico 25), que expresaban la gratitud mediante la generosidad, la justicia y la misericordia. Estas celebraciones enseñaban que la verdadera gratitud no se limita a palabras, sino que se manifiesta al compartir con los necesitados y al extender la misma bondad que Dios ha tenido con nosotros. Gratitud era dar, restaurar, perdonar y liberar… así como Dios lo hizo con ellos.

En el Nuevo Testamento entendemos que todas estas fiestas apuntaban a Jesucristo. Él es nuestra Pascua (1 Corintios 5:7), nuestras Primicias (1 Corintios 15:20), nuestra Expiación perfecta (Hebreos 9:12) y nuestro Tabernáculo viviente (Juan 1:14). Por eso, al llegar a este Día de Acción de Gracias, reconocemos que Cristo es nuestra verdadera fiesta y nuestro mayor motivo de gratitud. En Él encontramos perdón, provisión, presencia y esperanza. Por eso, vivamos agradecidos, no mirando lo que nos falta, sino celebrando todo lo que Dios ya nos ha dado en Su Hijo.

¡Quiera Dios que nuestro corazón mantenga siempre un espíritu de agradecimiento!

¡Amen!

Pastor Israel.



Comentarios

Etiquetas de Temas y Asuntos

Mostrar más

Buscar por Pasajes Biblicos

Mostrar más