Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y ha sido
cubierto su pecado. Salmo 32:1
¿Por qué hay tantos creyentes amargados y tristes que no gozan de
la experiencia de sentirse Bienaventurados? Quizás todavía no han experimentado
el sentirse completamente perdonados. ¡Sin embargo, qué bendición tan hermosa
sentir que los pecados de uno han sido perdonados! El postmodernismo nos quiere
imponer técnicas terapéuticas para tratar con lo que la Biblia llama
transgresión (o pecado).
La manera
moderna de pensar en cuanto a la fe consiste en aumentar la autoestima,
buscar que remplacemos los pensamientos negativos con pensamientos positivos,
exhortarnos a que olvidemos nuestras malas acciones como algo del pasado
que fue culpa de las circunstancias. Si hacemos lo anterior, entonces seremos
verdaderamente felices. La verdad es que tal manera e pensar es una estafa. Nuestras transgresiones no se pueden
tratar con tales curas formadas por las ideas del hombre moderno.
Simplemente, no podemos tratar nuestros pecados con curas como hacemos con las
enfermedades. Cuando un enfermo va al médico y recibe una medicina y mejora,
entonces se alegra. De la misma manera, cuando pecamos, tenemos que
pedirles perdón a Dios y a la persona ofendida. Si lo hacemos, sentiremos
que somos bienaventurados (o felices) y sentiremos que nuestros pecados han
sido verdaderamente cubiertos.
Simplemente el principio que este verso bíblico
nos dice es que si queremos vivir alegres pues hay que experimentar el
perdón ¡Amen!
Pastor ICC