Se acordarán, y se volverán a Jehová todos los
confines de la tierra, Y todas las familias de las naciones adorarán
delante de ti. Porque de Jehová es el reino, Y él regirá las naciones.
Salmo 22:27-28
¡Verdad que
estamos asombrado con esto de que el gobierno está cerrando algunas de sus
estructuras! Es noticias por todos lados, pero la verdad es que esto es algo que estaba
en el hermoso plan de Dios. De vez en
cuando, nuestro Dios nos da sustos que nos recuerden que El es el que rige a
las naciones. A menudo, como le pasaba
al pueblo de Dios en la historia Bíblica cuando peregrinaba en el desierto
hacia Canaán, El Señor les hacía pasar por situaciones difíciles para que se
acordaran que el El estaba en control.
Dios quiere que todos los confines de la tierra, o lo
que es decir en todos los límites del mundo,
se reconozca que El es Dios, Rey de Reyes y Señor
de Señores. Cuando las naciones lo olvidan,
Dios les hace atravesar por circunstancias difíciles. Benjamin Franklin dijo que, “El hombre será
ultimadamente gobernado por Dios o por tiranos.” Aquí en los Estados Unidos, hay un tirano que
se llama Dólar. El nos obliga a trabajar
día y noche, dividiendo a las familias al hacer que no exista tiempo para los
hijos ni esposas. Este tirano nos hace
pensar que en los partidos políticos podemos encontrar seguridad. Ante Dólar, que no es más que un billete, se
arrodillan grandes y niños, esperando sus bendiciones. También miles de cristianos dejan de asistir
a sus iglesias con tal de obtener el favor de Dólar quien les proveerá supuestamente
“de todo.” ¡Pero qué ironía! Cuando muchos
piensan y proclaman que ya la economía se levanta, el gobierno se divide en sus
decisiones y no se ponen de acuerdo para utilizar a Dólar y ver de qué manera este
regirá a nuestro país a través del presupuesto del próximo año. ¿Sabes esto es
una crisis que viene de Dios? ¿Te atreverías a darle las gracias a Dios por semejante
crisis nacional? Estas son las crisis
que nos recuerda que Cristo es el Señor y no Dólar.
Amada iglesia y hermanos en Cristo, que nuestras familias
sean de las que adoran delante de Dios y nunca delante de Dólar, único culpable
de lo que está pasando hoy. Confiemos en
nuestro Dios porque de él es el reino, y él regirá las naciones. ¡Amen!
Por el Pastor
Israel Cordoves-Carrazana