Después de haber examinado Facebook por algún tiempo he llegado a la conclusión de que no está bendiciendo a muchas familias. Sin embargo, sabemos muy de cerca que cientos de ministerios y buenos cristianos están en Facebook. ¿Qué hacer entonces? Sugiero que practiquemos el pasaje del Apóstol cuando dice, “…examinadlo todo, retened lo bueno.” Hay muchos beneficios que nos brinda Facebook, por lo tanto, para que este sea de bendición y no de maldición sugerimos lo siguiente:
1. Si usted está casado/a ponga una foto de usted y su pareja. Esto evitará problemas con aquellos traviesos o traviesas que se pasan de rosca por la vía del internet.
2. No de información privada. Por ejemplo muchas personas ponen donde van a estar tal fecha y eso está comprobado por las autoridades que es una fuente de información para los que quieren perpetuar actos criminales.
3. Ponga en el ‘profile’ (perfil) solo la información que se puede compartir y asegúrese, si usted es casado/a que su pareja está de acuerdo con la información.
4. Ponga versos bíblicos y música cristiana cada vez que pueda. Esto permitirá que Facebook sea una herramienta utilizada para bendición del pueblo de Dios y de su vida personal.
5. Utilice Facebook para ponerse en contacto con ministerios que son útiles para su vida.
6. Ponga límite al tiempo. Facebook es adictivo y muchas parejas tienen problemas porque se pasan horas tras horas en línea. En diciembre 21, 2009 el Noticiero Univisión anunció que según estudios hechos, Facebook estaba causando problemas entre matrimonios y aun siendo causa de divorcio en los E.U. Muchos matrimonios han tenido problemas porque tanto él como ella se han puesto a aceptar personas que no conocen. Luego lo que ha pasado es que han habido insinuaciones o imprudencias que causan problemas matrimoniales.
7. La palabra clave para entrar (password) la tienen que tener los dos cónyuges. En el matrimonio no puede haber secretos.
8. Tenga cuidado de no poner algo que tenga imágenes comprometedoras.
9. Recuerde que las noches son para estar con su pareja, no con Facebook. Su intimidad no es para el mundo cibernético sino para Cristo.
10. No acepte la amistad de personas que usted no conozca y si conoce a la persona pues recuerde que las amistades son para la gloria de Dios. ¡Busca amistades sanas! La persona que le ama a usted, sea familiar o amigo, le llamaran a su teléfono o harán lo posible por ponerse en contacto con usted de alguna manera. Si la única manera es una simple y ficticia notica por Facebook, pues tal amistad no está muy interesada en hablar con usted.
¡Hermanos que el Diablo no nos enrede con la tecnología!
Amén.
Escrito en Febrero 20, 2010
Pastor I.Cordoves, Jr.
Pastor I.Cordoves, Jr.