“…reforzad la guardia, poned centinelas, disponed las emboscadas.
Porque Jehová ha hecho un plan y realizará lo que ha dicho.”
Jeremías 51:12
Porque Jehová ha hecho un plan y realizará lo que ha dicho.”
Jeremías 51:12
Los hijos e hijas del Dios vivo, como miembros del ejército de Cristo, estamos llamados para estar alertas. Sin embargo, de una manera misteriosa vivimos engañados con un sentimiento de paz. Es de esa manera en que Satanás ha ganado terreno. ¿Pero qué llamado es ese? Simplemente, Dios ordenaba a que reforzaran la guarida, que pusieran centinelas y que se alistaran estratégicamente, El se encargará de ejecutar el plan.
En Primer lugar, Dios quiere que reforcemos nuestra vigilancia. Son muchos los que caen y embarran sus vidas en el lodo pecaminoso simplemente porque no han buscado refuerzo. La iglesia, comunidad guerrera de nuestro Señor, puede ser ese refuerzo que necesitamos. Saber que en nuestras luchas tenemos un pueblo de nacidos de nuevo produce un aliento para seguir luchando. No obstante, cuando parece que hay una resistencia indoblegable, las fuerzas fallan y el enemigo obtiene sus victorias. Son victorias que se ven en los hogares destruidos, la rebeldía de los hijos e hijas, matrimonios divorciados e hijos abandonados, iglesias divididas y cristianos espiritualmente fracasados. También, son victorias ganadas en lo más íntimo del corazón de millones de creyentes. Creyentes que habiendo sido libres en Cristo han caído en la esclavitud del pecado sembrado en sus mentes no renovadas por la Santa Palabra y el poder del Espíritu Santo. No podemos quedarnos satisfechos con la preparación que podamos sentir que tenemos para enfrentarnos con nuestro enemigo, el león rugiente que busca a quien devorar
Por eso, hay que disponer también de emboscadas. O sea, operaciones militares rápidas en el terreno de la oración que nos liberen y nos lleven a destruir la obra del Diablo en nuestras vidas. ¿Pero cómo lograr ser vigilantes eficaces y guerreros en las emboscadas del Señor? Solo hay una respuesta, la cual implica que tengamos fe en el perfecto plan de nuestro Señor. ¡Qué bendición la nuestra! Los creyentes del Dios vivos podemos confiar en sus planes quienes nunca fallan y sin duda alguna se cumplen al pie de la letra. Y aun cuando parezca que Dios no esté luchando, El estará llevando su plan de guerra que terminara en la victoria de los nacidos de nuevo.
¡Cristianos, levantemos la guardia espiritual, preparemos las emboscadas de la fe y confiemos en que ya Dios ha hecho un plan que nos dará la victoria deseada? - ¡Amen!
Pastor Israel Cordovés, Jr.
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